Bar-bar...ie social!

Es increíble como la BAR BAR ie social que hoy vivimos, puede llegar a insesibilizar a los que se dicen animales racionales y capaces de expresar sentimientos, como los seres humanos, ante hechos tan atroces como atentar contra la vida de otro ser humano.

Se dice que somos seres sociales, seres políticos, seres que podemos comunicarnos y que juntos somos capaces de crear...el mundo en el que vivimos todavía en su gran parte es testigo de ello, sin embargo, hemos llegado a una era en la que atentar contra la vida de alguien más, por la razón que sea: lío de mujeres, narcotráfico, ajuste de cuentas o simple fanatismo, se ha vuelto "normal".

El matar nunca ha sido un secreto, se ha matado para comer, para conquistar, para sobrevivir, pero ¿para terminar con la vida de alguien sólo por que esa persona se vuelve incómoda para mi propia vida?. A que punto hemos llegado que para salir a convivir un día o una noche en esta ciudad, tengas que estar atento hasta de ir al baño.

No pretendo ser puritano, ni mucho menos alarmista, pero si creo que sucesos que diario suceden en este mundo como el que acabamos de vivir en el caso de Salvador Cabañas, nos deben obligar a reflexionar sobre nuestro lugar en el mundo, como personas, como sociedad pero sobre todo como seres que "supuestamente" nos creemos superiores a todos los que habitan en este planeta.

El atentar contra al vida de alguien en el fondo nos lleva a pensar en un grado de descomposición psicoemocional de alguien, pero nos lleva mas a pensar en que ese alguien no deja de ser un producto social de un mundo el cual está ya muy descompuesto y que no hace con estas noticias solo mostrarnos los emergentes y analizadores a los que no estamos poniendo atenció debidamente.

Hoy más que nunca y no por este suceso en especial, debemos tomar conciencia de que la vida no es nuestra, que es tan solo un préstamo para llevar a cabo metas y objetivos que nos encumbren en grandezas sociales y personales, y no que nos derrumben en el vacío de la desesperanza y la angustia de uan realidad que cada día vemos mas "normal" cuando dejó de serlo desde hace mucho.